En el mundo actual, hay muchas personas inestables emocionalmente. Infortunadamente, desde los tiempos del Siglo de las Luces y la Revolución Francesa se ha hecho énfasis en una educación de talante intelectual. Se ha dejado de lado lo emocional y la humanidad no recibe entrenamiento sobre esta faceta de su existencia.
La estabilidad emocional y la personalidad
Ocurre que la estabilidad emocional es uno de los cinco pilares de la personalidad. Por eso, la psicología le da un interés especial al estudio de la misma. ¿Cuáles son los cinco factores que acabamos de aludir? Pues, los indicamos a continuación:
- Amabilidad: son los rasgos relativos a la empatía. La capacidad de relacionarse con los demás.
- Responsabilidad: muy relacionada con la auto-disciplina. Igualmente, la capacidad de control y organización.
- Extraversión: implican la capacidad de comunicarse, de socializar.
- Apertura: la tendencia a socializar y experimentar dividir nuevas sensaciones.
- Estabilidad emocional: capacidad de manejar correctamente las emociones. Por ejemplo, no dejarse llevar por emociones negativas ni estancarse en las positivas.
Al ser un pilar de la personalidad, la estabilidad emocional juega un rol esencial en la vida de las personas. En tal sentido, los psicólogos intentan comprenderla y dar algunos tips para lograrla.
El concepto de estabilidad emocional
La estabilidad emocional es la manera en que podemos balancear nuestras emociones. Quienes no tienen esta cualidad, fácilmente pueden caer en problemas como la depresión y la ansiedad. Hay que decir que en situaciones estresantes o fuera de control, siempre aparecen emociones relacionadas con tales sucesos. También, cuando estamos en momentos en los cuales nos sentimos a gusto experimentamos emociones como la alegría.
No estamos exentos de ningún tipo de emoción. En cualquier momento podemos experimentar emociones positivas y negativas. Quienes tienen una alta estabilidad emocional, logran tener un control absoluto. No se dejan arrastrar por la tristeza, el estrés, la ira, el odio y otras emociones similares.
Desde punto de vista psicológico, se suele llamar “neurocitismo” al desbalance emocional. Es un problema bastante común en las sociedades actuales. Implicó un mal manejo tanto emociones positivas como negativas.
- Las emociones negativas: algunas que podemos mencionar son miedo, decepción, rabia, tristeza, melancolía, remordimiento, envidia, etc.
- Las emociones positivas: son las más agradables, siendo algunas como la alegría, amor, ternura, orgullo, etc.
Las emociones negativas son las que más fácil crean trampas para la vida de las personas. La gente se queda estancada en la tristeza la depresión. Le dan un peso enorme a unas emociones que pueden ser pasajeras.
No obstante, toca ahora mencionar un detalle: también hay problemas cuando no se manejan las emociones positivas. Por ejemplo, cuando alguien es feliz en una situación tiende a quedarse estancado en dicha situación. En cambio, las emociones negativas pueden inducir al cambio, ya que existe inconformidad. Es decir, muchas veces una emoción negativa en un indicio de que es necesario cambiar o modificar a ciertas cuestiones en la vida.
Lo que acabamos de seres una interpretación de las emociones. Eso es justamente lo que deben hacer las personas. ¡Interpretar de actuar en consonancia las emociones en un factor esencial! Sólo se logra con una correcta enseñanza de los factores emocionales.
La importancia de la estabilidad emocional en la psicología
Los psicólogos han dedicado buena parte de sus estudios al tema de la estabilidad emocional. Muchas terapias apuntan precisamente lograr ese balance necesario.
En dado caso, se considera que la inestabilidad emocional es una disfunción. Es decir, que los seres humanos por naturaleza deberían tender a dicha estabilidad. No obstante, van perdiendo esta habilidad debido a un mal el desarrollo de la personalidad. En este punto, hay que ser un par de distinciones:
- Temperamento: son aquellos rasgos y maneras de hacer que son heredados.
- Personalidad: son aquellos rasgos y modos de comportamiento que son aprendidos.
Ya hemos dicho que la estabilidad emocional es un rasgo de la personalidad. Hay personas que tienen una personalidad más inestable que otras en lo concerniente al aspecto emocional.
En dado caso, lo importante entender que esta escasa habilidad para balancear las emociones es algo aprendido. Por lo general, se observa en los padres y los hijos replican esta actitud. No obstante, los pequeños pueden copiar patrones inestables en sus emociones gracias a los amigos, personas con las que conviven, así como otra gama de factores.
¿Qué implica lo antes indicado? Pues, algo de enorme importancia: la estabilidad (o inestabilidad emocional) es algo que se asimila. Quienes padecen de inestabilidad emocional, en realidad, tienen un desorden de aprendizaje o fueron enseñados de manera incorrecta a gestionar las emociones.
¿Cuál es la labor del psicólogo ante un paciente con inestabilidad emocional?
La respuesta es: corregir la mala enseñanza que ha tenido la persona en el manejo de sus emociones. Empero, esto no es tan sencillo lograr. Usualmente, quienes asisten al psicólogo lo hacen luego de muchos años de incorrecto manejo de sus emociones. Por ende, ya tienen un hábito erróneo que es complicado de superar.
- El primer paso es que la persona entienda que tiene un problema, que acepte que no sabe lidiar con sus cambios emocionales.
- Luego, toca enseñar un poco sobre qué son las emociones.
- La gente cree que las emociones no se controlan: que no podemos hacer nada. ¡Esto es falso! Ciertamente, no podemos controlar la aparición de emociones… pero si podemos determinar qué hacer con ellas.
- Luego, toca decirla al paciente diversos tips para lograr el correcto balance emocional.
Si bien cada paciente es distinto, los pasos antes indicados son el punto de inicio para ayudar a las personas. No obstante, siempre hay que considerar a cada persona de manera individual. Ya hemos dicho que la cuestión del manejo de emociones es un rasgo de la personalidad. ¡Y cada personalidad es diferente!
Cómo lograr una correcta estabilidad emocional
Este es el punto álgido que deben afrontar los psicólogos. ¿Cómo lograr que una persona con mal aprendizaje sobre sus emociones logre balancearlas? Pues, se necesitan los siguientes aspectos:
- Que la persona reconozca sus emociones.
- Es necesario lograr un incremento de la autoestima, ya que solo así se tiene certeza de controlar el aspecto emocional.
- Hacer entender a las personas que las emociones son algo personal: nadie puede gestionarlas por ellos.
- Es necesario minimizar los síntomas extremos de la inestabilidad emocional. Por ejemplo, mientras la persona tenga depresión no podrá esforzarse en comprender y mejorar su problema. Muchas veces, se suele usar medicación para lograr calmar a los pacientes.
- Detectar la causa de la inestabilidad. Las razones más comunes son: sobre protección en la infancia, adolescencia difícil, tendencia al perfeccionismo, malos ejemplos en el entorno respecto al manejo de emociones, etc.
- Entrenar a la persona para que controle sus impulsos. No dejarse llevar por la rabia o la tristeza, cometiendo acciones extremistas que luego son reprochables. Esta es una situación que luego genera sentimientos de culpa que complican más el cuadro de neurocitismo.
- Hacer comprender que las emociones son pasajeras, pero si constante se rememora aquello que las estimula se causa daño a sí mismo. Además, si se mantiene viva una emoción nunca se logrará superarla.
- Sacar provecho de las emociones. Disfrutar y obtener ventajas de aquellas positivas. Valerse de las negativas para un proceso de revisión personal y de cambios en la vida.
Los anteriores son los objetivos del tratamiento. Cada profesional tiene maneras diferentes maneras de lograr mejorar a sus pacientes. A fin de cuentas, la psicología no es una ciencia exacta, sino una manera de entender a cada individuo de manera particular.