Si la psicología reconoce que la conciencia es una suerte de actividad de la mente que se reconoce a sí misma dentro de un espacio-tiempo; de actividad neuronal, capaz de elegir y hacerse evidente en las conductas individuales, mal podría afirmarse que todos los seres humanos tienen la misma conciencia.
En otras palabras, la conciencia varía de un sujeto a otro, por ello se denomina conciencia individual. Aunque mencionar la conciencia sin adjetivos resume exactamente la misma dimensión característica: esa capacidad humana de auto reconocimiento de estar vivos. En este artículo, se abordarán algunas de las dimensiones más interesantes de la conciencia individual
La noción de conciencia individual
Puesto de forma sencilla, la conciencia individual radica en la facultad humana de auto reconocimiento del yo y la cognición sobre la influencia del contexto sobre el mismo. Cada ser humano es una entidad individual, aunque esté inscrito en un contexto sociocultural que lo modela desde que nace. La conciencia se conforma también por determinantes biológicos.
La conciencia individual está determinada por el desarrollo de las inteligencias. Por ejemplo, un escalador de montañas posee una conciencia individual marcada por las referencias espaciales de los ambientes naturales que ha confrontado. Su inteligencia viso-espacial, por un lado, y su inteligencia cenestésico-corporal, por otro, trabajan en conjunto para asegurar su subsistencia en ambientes físicos adversos.
Si se compara con otra persona que se dedica al diseño de programas informáticos, se verifica la tesis de que cada sujeto vive según su mundo y establece sus prioridades vivenciales; discrimina y analiza su pensamiento y entorno según la conciencia individual, que se fundamenta en sus aprendizajes.
La operatividad de la conciencia individual
Gracias a la teoría de la autoconciencia hoy se puede afirmar que el pensamiento se piensa. Es decir, el sujeto no es lo que piensa, sino la entidad que discrimina sus pensamientos. La conciencia personal sería entonces una suerte de sujeto que se analiza y modela. Es el yo interior.
Un individuo puede pasar un día sin pensar en su ser interior; no obstante también puede focalizar su atención en ese yo más íntimo. Ese mirarse con propósito se denomina <autoevaluación>.
Los individuos se autoevalúan para detectar si están pensando, sintiendo y actuando como deberían, según sus códigos morales y éticos. Es una entidad auto-censora que compara y discrimina, juzga y corrige los pensamientos y conductas.
La conciencia individual se ve así auto-regulada por unos estándares ya determinados, que sirven para detectar si se están tomando las decisiones correctas para lograr las metas pautadas.
¿Es posible vivir alejados de la conciencia individual?
En principio, pareciera una contradicción, pero no lo es. La autoevaluación puede arrojar que existe una alineación entre el yo y los estándares propios; pero, también es posible que arroje una discrepancia entre el yo y los estándares propios. Cuando el sujeto halla una discrepancia tiene dos alternativas: hacer lo propio para reducir la diferencia o evitarla por completo de forma activa.
El factor que determina qué hacer depende de las expectativas que se tengan respecto a poder cambiar la discrepancia. Si se considera que existen pocas posibilidades de cambiar la diferencia se evitará. Caso contrario, se hará lo necesario para que coincidan.
Las acciones personales además dependerán del tiempo y esfuerzo que llevará el realineamiento; cuando las diferencias son grandes es poco probable que se asuma el esfuerzo. El ser humano tiende a evitar la autoevaluación cuando la discrepancia es significativa.
La conciencia individual tiende a buscar la satisfacción personal. Cuando se es consciente de sí mismo, pero se cree que existen pocas posibilidades de éxito, se tenderá a pensar que el resultado depende más de factores externos que de los esfuerzos propios.
Cuando el individuo es consciente de sí mismo y cree que existe una elevada probabilidad de éxito, regularmente se apresura a otorgarle ese éxito o fracaso a los esfuerzos propios. Pero, también cabe la posibilidad que la autoevaluación señale que no se está a la altura de los estándares, por lo que los mismos podrán ser elevados.
Aunque es más probable que los estándares sean tan estrictos que nunca se puedan alinear con los estándares internos. Las frustraciones tienen su origen en la falta de alineación entre los estándares externos e internos.
La conciencia individual o autoconciencia es un factor esencial en el cómo se piensa, cómo se siente, cómo se actúa y se reacciona a los pensamientos, emociones y acciones propias.
Importancia de la conciencia individual
- La conciencia individual hace que el sujeto sea más proactivo; promueve la aceptación y favorece el autodesarrollo asertivo.
- La autoconciencia facilita observar la realidad desde el punto de vista de los demás; permite la práctica del autocontrol; conduce al trabajo creativo y productivo; y por añadidura, favorece la autosatisfacción personal y la autoestima.
- Determina la toma de buenas decisiones.
- Facilita la optimización de las actividades laborales, el poder comunicacional en el trabajo, la confianza personal y el bienestar laboral.
- El conocimiento de la individualidad permite la evaluación de las situaciones de forma realista para decidir de la mejor forma.
Ejemplos de conciencia individual
A continuación se ilustran tres ejemplos hipotéticos del uso de la conciencia individual:
Pedro en el trabajo
Pedro manifiesta serios inconvenientes para redactar un informe trimestral en el trabajo. Sus informes regularmente no cumplen los mínimos de exigencia necesarios. Se percata de la diferencia entre lo que cree que es capaz de hacer (sus estándares) y su desempeño. Hace un alto en su trabajo y reflexiona sobre sí mismo para determinar dónde está el problema y qué debe hacer.
De la auto-reflexión se da cuenta que puede hacer el trabajo que se exige en el informe, pero luego le cuesta mucho ponerlo en palabras coherentes. Además, su capacidad autoreflexiva lo lleva a determinar que la solución a mediano plazo es hacer un curso de redacción y, a corto plazo, pedirle a un colega que le revise el informe antes de enviarlo. Paralelamente, decide crear una plantilla para recordar los puntos que nunca debe olvidar en el informe.
Laura en su hogar
Laura tiene problemas de comunicación con su esposo. Particularmente, siente que no le da el tiempo que merece. Asume que su esposo no le da importancia a sus expresiones de amor. Ello motiva que tengan discusiones frecuentes. Laura revisa sus emociones y sus comportamientos y se percata de que ha reaccionado en ocasiones de manera incorrecta, haciendo que los gestos de amor de su esposo parezcan insignificantes.
Con base a la revisión de su conciencia, le propone a su esposo una comunicación asertiva, donde no se deje nada a suposiciones, sobre todo hablar más a menudo sobre cómo quieren mostrar y recibir amor.
María no se reconoce a sí misma
María se encuentra en plena lucha contra la baja autoestima. Se siente deprimida y con frecuencia da por sentado que no podrá lograr tal o cual cosa. En un momento de claridad mental, acude a un psicoterapeuta, que la ayuda a retomar y fortalecer la conciencia de sí misma.
Con las terapias, va recuperando paulatinamente la seguridad en sí misma y logra despejar el temor a no ser lo suficientemente competente. María reaprende, reorienta sus pensamientos a la pregunta ¿y si tengo éxito? Por ello, abre su pensamiento a nuevas posibilidades y trabajo a favor de fortalecer su autoestima.
Estas tres referencias indican la importancia de alcanzar una fuerte conciencia individual, producto de la autoconciencia, del trabajo autoreflexivo. Sin la conciencia de sí mismo, ninguno de estos personajes hubiese superado sus conflictos entre sus expectativas y la realidad.