El acoso laboral es un fenómeno que ocurre en el ámbito profesional por distintas razones. En la mayoría de los casos se trata de la competitividad, sin embargo este es un comportamiento social que es más complejo.
Se puede hacer referencia a este tema utilizando la palabra “bullying”, ésta proviene del inglés y se traduce como acoso o humillación. Pero generalmente para referirse al acoso laboral se utilizado otro término el cual es “mobbing”.
En diversas empresas alrededor de todo el mundo se han registrado varios casos de este tipo, los empleados manifiestan sentirse acosados por sus jefes. Pero también pueden surgir conflictos entre compañeros.
Al igual que otros tipos de acosos, se mencionan características en común. Se ejerce la violencia por medio de insultos, amenazas, golpes y acciones que vulneran la estabilidad mental de las víctimas. De acuerdo a como sea la relación entre las personas involucradas, se emplea distintos métodos violentos para agredir y humillar.
¿Qué es el bullying laboral (mobbing)?
Se define como bullying laboral al acoso y hostigamiento que sufren algunas personas dentro del entorno en el que trabajan. Estos individuos de manera sistemática y repetida, experimentan episodios de violencia física y psicológica. Este es un fenómeno común en algunos países, en donde los derechos de los trabajadores no son tomados en consideración.
Es frecuente este tipo de casos dentro de las escuelas, pero los abusos no tienen límites y pueden suceder en el hogar o el trabajo. En este último caso, el bullying laboral ocurre por razones que están directamente relacionadas con las actividades que allí se realizan. Las diferencias creativas y la competitividad suelen ser las principales causas.
Suele describirse situaciones conflictivas cuyos protagonistas son dos personas que trabajan juntas. Sin embargo, también se puede involucrar a un grupo, que materializa distintas formas de maltrato en complicidad. Estas acciones violentas afectan psicológica y físicamente.
El acoso laboral afectará tanto a hombres como a mujeres, tampoco tiene restricciones en cuanto a la edad, profesión o al cargo que ocupe la víctima. Anualmente se registra miles de casos de este tipo a nivel global. Por ello, en algunas empresas se han comenzado a implementar medidas que ayuden a evitar conflictos, que tengan repercusiones de este tipo.
Tipos y características
El acoso laboral se clasifica de dos maneras distintas, la primera de ellas es desde la posición jerárquica. Esto quiere decir que depende del tipo de relación que existe entre el acosador y la víctima. Esta categoría se subdivide en otras más, la primera es la jerarquía horizontal; la cual describe la relación entre personal que ocupa cargos similares en una empresa.
Debido a que estas situaciones suelen suceder entre compañeros de trabajo, las repercusiones no sólo afectan a nivel psicológico; sino también en las actividades laborales. En este caso, los conflictos se generan a partir de la competitividad, la enemistad, diferencias creativas, exceso de trabajo e incluso el aburrimiento.
En el caso de la jerarquía vertical, se está describiendo una relación entre subordinados y jefes. Quien cumple el rol de ser el acosador posee un nivel jerárquico superior con respecto al que ocupará la víctima, se le denomina mobbing descendente o bossing.
Podría darse el caso contrario, el mobbing ascendente. Se caracteriza por el acoso psicológico que proviene de los subordinados quienes atacan a personas que poseen un nivel jerárquico superior.
Otra clasificación de los tipos de acoso laboral toma en consideración cuál es el objetivo o las razones. Es decir, quienes deciden dar inicio con las situaciones de hostigamiento usualmente lo hacen con una finalidad. A continuación se describen los casos más comunes:
- El mobbing estratégico es un tipo de acoso descendente, que se caracteriza por implementar una estrategia cuyo objetivo es lograr que la víctima rescinda de su contrato voluntariamente. Suele ser empleado en empresas que desean evitar pagar una indemnización, correspondiente el despido considerado improcedente.
- El mobbing de dirección, o por gestión, puede darse por distintas razones. Es posible que se desee prescindir de un empleado que tiene un carácter difícil, o que suele generar conflictos y no se ajusta a las necesidades de la empresa. Por lo tanto, el objetivo es maximizar la productividad laboral por este medio, se comienza a amenazar con el despido en reiteradas ocasiones.
- El mobbing perverso tiene una razón definida. Las causas suelen relacionarse con una personalidad manipuladora y acosadora por parte de los victimarios. Se considera que es el tipo de acoso más perjudicial, además es difícil encontrar una solución debido a que no se precisa las razones.
- El mobbing disciplinario, como su propio nombre lo indica, es un tipo de acoso basado en las amenazas para obligar que las víctimas se ajusten a las órdenes dictadas. Se suelen utilizar castigos en personas que no se ajustan a las normas, aunque estas puedan vulnerar su integridad física e intelectual.
Causas más comunes y ejemplos
Hay varios tipos de causas que promueven el comienzo de episodios violentos y conflictivos entre compañeros de trabajo. Las relaciones entre las personas en estos ambientes suelen estar influidas por el estrés y los conflictos de interés. A continuación se describen las causas más comunes:
- El desempeño y la organización de algunos compañeros, pueden suscitar el enojo o la insatisfacción de otros. Ello se debe a que las expectativas no son cumplidas como se esperaba.
- La sobrecarga de trabajo y la falta de motivación, generan un ambiente laboral en el que las personas se ven obligadas a realizar actividades repetitivas y aburridas.
- Los directores y jefes autoritarios, que buscan la forma ideal para optimizar el ritmo laboral. Contrariamente, lo que causan es que se creen conflictos entre los trabajadores.
- La asignación de las mismas tareas a los empleados les genera monotonía y malestar. Esto supone que la persona no sienta que está desarrollándose profesionalmente. Además, causa frustración, lo que significa que el desempeño sea deficiente.
- La falta de una comunicación directa y clara entre los compañeros de trabajo, hace que disminuya las oportunidades de realizar proyectos que produzcan beneficios.
- Criticar la vida privada de los compañeros, supone una invasión al bienestar personal de cada persona.
- No valorar el esfuerzo y los aportes. Las críticas con respecto al rendimiento mostrado por cada uno de los integrantes del grupo de trabajo.
- El aislamiento social significa evitar tener contacto verbal y físico.
- El desprestigio de los trabajadores, implica dañar de forma permanente la reputación personal y laboral. Se puede esparcir rumores y mentiras con tal de lograr este objetivo.
¿Qué hacer para prevenir el bullying laboral?
Varias instituciones internacionales relacionadas con la regulación de normas laborales, proponen diversas ideas para su prevención. Una de ellas es la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo, también otras coinciden en el establecimiento de planes de prevención. Estos integran normas que promueven la mejora de las condiciones laborales, y también respaldan derechos básicos como los que se mencionan a continuación:
- Se debe implementar una dirección enfocada en la democracia. De esta manera, se garantiza que cada persona podrá ser valorada y escuchada por igual.
- Mantener una comunicación fluida y directa. Cada persona estará informada acerca de los proyectos y objetivos en los cuales se va a enfocar el trabajo.
- Ofrecer a cada integrante la posibilidad de proponer y elegir cuáles tareas tendrán prioridad. La distribución del trabajo de forma equitativa, garantiza un aumento en el rendimiento.
- Evitar mantener un ritmo laboral repetitivo y monótono. Se debe buscar diversas metodologías que promuevan la creatividad y el entusiasmo de los trabajadores.
- Establecer planes con indicaciones concisas y claras. De esta forma se evita confusiones, cada trabajador entenderá cuáles son sus funciones y responsabilidades.
El acoso laboral debe ser incluido en las evaluaciones de riesgo de las empresas. Así se puede prevenir cambios sorpresivos en las relaciones entre los empleados.
Igualmente, la educación de cada uno con respecto a que significa el acoso laboral. Conocer el alcance que tiene este tipo de violencia, ayudará a que disminuya las posibilidades de que suceda en este entorno.
Cada empresa deberá formular normas y directrices, que favorezcan una interacción social adecuada y positiva. También se especificará cuáles son las sanciones y las consecuencias en los casos de acoso.
Así cada nuevo empleado comprenderá cuáles son las reglas, organización y valores de dicha comunidad. El respeto mutuo debe ser promovido ampliamente.