Acoso

En psicología se ha podido identificar varios tipos de comportamientos que se caracterizan por manifestar miedo ante los patrones de conductas negativas. Estos pueden estar directamente dirigidos para dañar la integridad personal, pero también pueden estar enfocados hacia varios objetivos. Las personas que se sienten aludidas comenzarán a sentir que son acosadas.  

El acoso se destine como el conjunto de patrones constituidos por conductas frecuentes que se basan en actos delictivos. Estos tienen un origen individual, ya que una persona decide comenzar a dirigir estos daños hacia un objetivo en específico. Entonces se trata de una situación en la que se ven involucrados una víctima y un acosador. 

En un principio puede ser difícil lograr identificar con éxito este tipo de situaciones. Desde la perspectiva de terceras personas podrían ser actos inofensivos e incluso pueden pasar desapercibidos. Sin embargo, eventualmente la violencia y la gravedad de los hechos van aumentando su intensidad. En la mayoría de los casos, la resolución de estos hechos depende íntegramente de que la víctima denuncie a su acusador. 

Estadísticamente el acoso es uno de los problemas sociales que mayor cantidad de registros presenta anualmente. Se trata de un problema social que no restringe edad, género, condición económica y tampoco hay limitaciones geográficas. A nivel mundial siguen existiendo estadísticas que demuestran que ha habido un repunte de las denuncias por acoso. A continuación vamos a analizar a mayor profundidad este tema. 

¿Qué es el acoso?

El acoso en psicología define a un conjunto de comportamientos que se caracterizan por molestar, perseguir y hostigar a una o varias personas. En sí misma esta palabra hace referencia a la acción o conducta generada con la finalidad de incomodar a otra persona. Puede ser un término aplicado en distintos ámbitos y no sólo en psicología. Por ejemplo, suele hablarse de acoso en derecho cuando se trata de describir situaciones en las cuales se está vulnerando la seguridad personal, y el derecho a la propiedad privada. 

Se ha podido precisar que las situaciones de acoso presentan una clara pretensión en abusar del poder para limitar o manipular. Para ello se establece un puesto jerárquico en el cual la persona acosada es evidentemente desfavorecida. El acosador va a buscar como presionar a su víctima y mantener una relación violenta constantemente. 

Puede realizarse de distintas maneras, lo más habitual es que el victimario decida perseguir, insultar, amenazar, hostigar, desvalorizar, hacer insinuaciones obscenas, mentir e incluso destruir bienes de uso personal. En realidad se trata de una situación compleja que puede manifestarse de tantas maneras, que como consecuencia la víctima podría sufrir daños físicos y mentales a largo plazo. 

Esta situación suele mencionarse con el término proveniente del idioma inglés denominado como bullying. En la mayoría de los casos se hace referencia a un tipo de acoso que sucede dentro del ambiente escolar, podría tener lugar en cualquier institución educativa; o que los involucrados sean estudiantes. 

Se logra identificar públicamente cuando la violencia física y las humillaciones resultan ser muy evidentes. Además la víctima comienza a manifestar claros indicios de afectación de su estado emocional y de su integridad física. Pero también el acoso puede desarrollarse a distancia, utilizando tecnología por medio de internet o telefonía móvil. 

¿Cómo se clasifican los tipos de acoso?

Debido a que el acoso puede darse en cualquier ámbito, también se considera que cualquier individuo puede sufrirlo. Las agresiones parten de actos intimidatorios y violentos que se mantienen constantes, entonces la víctima se desestabiliza a nivel psicológico, físico y también social. No solo se trata de daños emocionales, sino también de daños materiales por lo cual las consecuencias son múltiples. 

Considerando los factores anteriormente mencionados, se ha realizado una clasificación de los distintos tipos de acoso que hasta ahora han podido ser identificados. Esta tipología se ha dividido tomando en consideración algunas de las características más resaltantes de cada caso, además se toma como referencia las acciones o recursos empleados para poder llevar a cabo estas acciones. A continuación se mencionan cuáles son: 

Acoso escolar 

El acoso escolar también se conoce con el nombre de bullying, Consiste básicamente en un maltrato tanto físico como verbal, lo cual sucede dentro del ámbito educativo. Esto quiere decir que las víctimas suelen ser niños y jóvenes de distintas etapas académicas, edades y géneros. 

Las razones para que esto suceda puede deberse a diferencias con respecto a la condición social, económica o racial. Diversos prejuicios y estereotipos son aplicados como excusa para llevar a cabo las amenazas e intimidaciones, así se vulnera la dignidad y seguridad personal. 

Acoso sexual

El acoso sexual se caracteriza por un comportamiento intimidatorio y lascivo, el cual vulnera la estabilidad psicológica y física de la víctima. El principal objetivo de este comportamiento se centra en lograr satisfacer las necesidades sexuales del agresor. Se atenta contra la dignidad y también la autoestima de quien sufre las consecuencias de estos actos. 

Resulta ser uno de los tipos más complejos, debido a que puede suceder en distintos ambientes y combinarse con otras tipologías de acoso. Por ejemplo, pueden suceder dentro del ambiente laboral, por lo cual se utiliza como una herramienta de intimidación. No sólo permite lograr favores sexuales, sino también escalar en la jerarquía para hostigar a quienes ocupan un menor rango. 

Acoso laboral

El acoso laboral o moral, también se conoce con el nombre de mobbing. Es una situación donde la víctima recibe un continuo tratamiento violento injustificado, se identifican actos hostiles que harán sentir miedo al trabajador. La finalidad es la de destruir la relación de la víctima con otros compañeros de trabajo, también supone un daño permanente en la reputación profesional del afectado. De esta manera se podría lograr el despido o la renuncia, el atacante podría beneficiarse en ambos casos. 

Acoso físico y verbal

Ambos tipos de acoso logran lastimar a la víctima de forma permanente, esto se debe a que eventualmente la intensidad de los ataques va aumentando. También depende de cuánto se prolongue y de sí se aplican los correctivos requeridos para garantizar la recuperación psicológica de la persona afectada. 

Ambos pueden lastimar tanto la salud física como mental, pero también pueden vulnerar la seguridad de los bienes personales; así como afectar a familiares o amigos. Ello se debe a que ocasionalmente las amenazas y ataques pueden tener varios objetivos. 

En el caso del acoso físico este se manifiesta a partir de golpes, destrozos de bienes materiales, empujones, cortaduras e incluso gestos inadecuados. Mientras que en el caso del acoso verbal, este se expresa por medio de insultos, amenazas, provocaciones, comentarios inapropiados, humillaciones y otro tipo de verbalizaciones desagradables. 

El ciberacoso

Esta es una de las nuevas tipologías que se han unido a la lista. Se lleva a cabo por medio de la utilización de las nuevas tecnologías que emplean el uso del servicio del internet. Se podría decir que es uno de los métodos más efectivos para los acosadores, ello se debe a que se logra ocasionar un mayor daño; afectando no sólo la vida personal sino también la académica y laboral. 

Debido a que el modo de vida actual depende prácticamente del uso de las redes sociales y otras plataformas similares, los acosadores logran limitar el uso de estos recursos para que la víctima se sienta hostigada. También resulta importante mencionar que este medio facilita la publicación de imágenes, videos o audios; que se hacen públicos y su contenido dañaría permanentemente la reputación de la víctima. En algunos casos estos mismos archivos son adulterados para esparcir rumores. 

¿Por cuales se motivos se genera?

Los motivos para los casos de acoso demuestran algunos factores en común, la relación entre acosador y víctima puede ser cercana e incluso dependiente. El comportamiento de una persona que acosa puede ser motivado por carencias afectivas o personales, Por problemas cognitivos puede desarrollarse este tipo de comportamiento, que de alguna manera busca cubrir estas carencias de una manera desesperada. 

También el hostigamiento puede utilizarse para encubrir una personalidad insegura, quienes aplican estos métodos sentirán cierta satisfacción o incluso respaldo por quienes son testigos de sus acciones. Entonces, una de muchas teorías supone que es un método que permite elevar la autoestima al humillar y ridiculizar a otras personas. 

También hay que considerar que las víctimas son propensas a estas situaciones cuando tienes personalidades que son auto exigente y que  buscan la aceptación por parte de los demás. También son el objetivo de los acosadores debido a que pueden ser influenciadas o manipulables, también la baja autoestima puede ser un factor determinante. 

¿Qué puede hacerse para solucionarlo?

En casos de este tipo resulta difícil precisar cuál es la manera más idónea para encontrar una solución que funcione para todos los involucrados. Debido a la complejidad de los hechos siempre resulta ideal contar con la ayuda de profesionales médicos, así como también dar aviso a las autoridades correspondientes. 

Para recibir asistencia inmediata se debe llamar a los números de emergencia o cualquier otro recurso que permita entablar una comunicación directa. Al alertar a personas capacitadas para ayudar, se está dando un importante primer paso. Tanto familiares como también amigos, y compañeros de trabajo o vecinos; todas pueden participar para ayudar a la víctima. 

El personal que se encuentra en los departamentos de policía y en las oficinas de los fiscales, ellos están preparados para estas situaciones, pueden llegar directamente al lugar donde están ocurriendo los hechos. La finalidad es aplicar las leyes locales que han sido diseñadas para tratar estos tipos de casos. Se solicitará una orden de protección y se activaran otros servicios sanitarios que serán integrados a un plan de seguridad. 

De igual forma se deben de documentar y registrar todos los encuentros que se realicen tanto con el acosador como con la víctima. También se deben recabar evidencias proporcionadas por posibles testigos, todos los registros de los incidentes que demuestren el acoso serán de ayuda. Finalmente, estos recursos serán utilizados para evitar que el acoso continúe y se limite el contacto entre las personas involucradas.